En muchas ocasiones es común ver al tarot como una forma de adivinar el futuro, pero esto es en realidad uno de los malentendidos más grandes del tarot, pues en realidad las cartas no nos van a mostrar lo que va a pasar en un futuro, sino que nos mostrarán los diferentes caminos existentes, el panorama y detalles importantes acerca del sentido real de las cosas, personas y situaciones que se involucran en tu presente.
"Y esto, de algún modo, puede cambiar el futuro, pero será a partir de las decisiones que tú tomes y no a partir de un hecho ya dado que tenga que pasar sí o sí."
Las cartas del tarot, y más aún las del tarot convencional o de Marsella, provienen de arquetipos, es decir, de principios universales que generan ideas y pensamientos cuyo sentido puede comprender una persona de casi cualquier lugar del mundo.
Por tanto, la base del tarot nunca nos va a ofrecer dictámenes concretos acerca del futuro, sino que nos permitirá vislumbrar las ideas, símbolos y energías predominantes, y será labor de cada quien interpretar su significado. Claro está, aquí tiene también gran valor la aportación del tarotista.
"Otro error común, y que quizás esté justificado por el mal uso que en ocasiones se ha dado a este conocimiento milenario, es vincularlo con mera charlatanería."
Pues, no sólo grandes ilustrados a lo largo de la historia han usado el tarot, también en épocas más modernas eminentes investigadores de la psicología humana, por ejemplo Carl Gustav Jung, abrieron todo un campo de estudio sobre el tarot a partir de su enorme carga semiótica, la cual se presta a múltiples ejercicios prácticos con la psique, precisamente a partir de la misma interpretación de arquetipos.
En qué situaciones sí me sirve el tarot
Aunque el tarot no es una bola de cristal que va a mostrar lo que va a suceder en tiempo futuro, sí es una gran herramienta para algunas de las siguientes situaciones:
Para tomar una decisión importante
"Si te encuentras cerca de tomar una decisión que consideras crucial para tu vida, el tarot te puede aportar una reflexión importante acerca de tus mejores perspectivas."
Por ejemplo, vas a cambiarte a un nuevo colegio, o es momento de especializarte en tu campo de estudio, etc.
Aunque el tarot te puede mostrar qué tipo de perspectiva pueden presentar tus diferentes alternativas, quizás no estás considerando que no es la más apta para tu perfil, y esto se puede interpretar con las cartas o quizás podría ofrecerte, por otro lado, un panorama dominante y de gran éxito, lo cual podría augurar un mejor futuro.
Conflicto emocional
"Cuando tienes una preocupación, una duda o una inquietud profunda que no logras despejar de tu mente, quizás el tarot podría ayudarte a aclarar tus pensamientos, encontrando un mejor sentido hacia aquella situación que te acongoja."
Por ejemplo, tienes tensión porque sientes que la situación con tu jefe está empeorando y temes que quizás pierdas el empleo, pues las cartas podrían ofrecerte un panorama acerca de la actitud o sentido que podría tener tu jefe hacia ti.
Quizás descubras que sólo estás exagerando las cosas y tras la tormenta se vislumbra la calma, o bien encuentres indicios de que efectivamente podría haber una energía malintencionada contra ti, lo que te podría generar un futuro aún peor de continuar así.
Ante un riesgo
Si te encuentras en una situación vulnerable donde consideras que estás corriendo algún tipo de riesgo y quieres ver de forma más amplia el panorama, puedes consultar las cartas y encontrar si se trata de una situación favorable de la que quizás no te tengas que preocupar o, por el contrario, deberías tratar de tomar cartas -de otro tipo- en el asunto.
Por supuesto, aún no existe el tarotista que te garantice un 100% de efectividad, y si alguien lo afirma es un charlatán.
"No obstante, si tras varias lecturas, incluso con diferentes especialistas en tarot, el sentido sigue siendo el mismo, quizás deberías considerar con bastante seriedad esta opción."
Para conocer la verdadera actitud de una persona
Otra aplicación práctica en la que sí llega a ser de utilidad el tarot, y que es también uno de los fines que se ha abordado de igual forma en los múltiples oráculos milenarios que han existido en la historia de la humanidad, es como forma de descifrar las intenciones o el sentido de las energías que existen en una persona.
Por ejemplo, has conocido a alguien que te está ofreciendo la oportunidad de convertirse en socios. Claro, deberás hacer estudios de mercado o cualquier análisis objetivo que te sea posible, aunque nada de esto te va a mostrar cuál es la intención que podría tener esa persona.
Por su parte, el tarot te puede guiar para conocer si se trata de un camino que a la vista aparenta algo fructífero, feliz o duradero. Es decir, matices positivos.
Lo cual podría ser antagónico al hecho de recibir un diagnóstico sombrío, escarpado y oscuro. Este tipo de pistas son las que ofrece el tarot y que, bajo tu interpretación y con el apoyo de un tarotista, te ayudarán a tomar decisiones más acertadas.
En qué situaciones no me ayuda el tarot
Para qué cosas definitivamente no deberías usar el tarot:
Para cosas a muy largo plazo
Cuanto más largo sea el plazo sobre lo que tienes dudas, menores serán las probabilidades de vislumbrar un diagnóstico acertado.
No sería muy útil acudir hoy a un tarotista y consultar cómo le irá a España en el Mundial del 2026 o cómo será tu vida después de que termines la carrera. Tiene más efectividad centrarte en cosas que ocurrirán a un plazo cercano o medio.
Hacer que las cosas cambien
Si estás consultando el tarot porque te presentaste a un examen y temes suspender, o dejaste a tu pareja y ahora te sientes arrepentido, el tarot no te ayudará tampoco a cambiar el pasado ni el presente, se trata de interpretaciones, no de cartas mágicas que solucionarán tus problemas sin más.
Recuerda que con el tarot tú mismo eres quien debe tomar la decisión, aunque si sabes comprender el significado de los símbolos y logras identificar su relación con tu vida, puede ser una magnífica herramienta para ir encontrando un mejor camino.